Por Enrique Chávez Estudillo *
Una disculpa a la ciudadanía
Hace poco menos de 2 años, la ciudadanía votó mayoritariamente para que mi partido, el PRI, continuara gobernando el municipio de Puebla, como una demostración de su confianza hacia quien entonces encabezaba la planilla de candidatos priístas y de reconocimiento por el trabajo y los resultados que el ayuntamiento 2005-2008 efectuó por la Angelópolis.
Lamentablemente, el hecho de que hoy nuestra querida ciudad se encuentre llena de baches, con millares de lámparas apagadas y montoneras de basura me lleva a pedirle a la gente - a los poblanos - una sincera disculpa, porque el actual gobierno municipal no ha sabido cumplir con las expectativas que generó cuando fue electo al no darle los servicios públicos que merece.
Al igual que muchos de mis compañeros regidores, que piensan y sienten lo mismo que yo y como representante ciudadano que soy, elegido por el voto de la gente, formo parte de este Ayuntamiento y me avergüenzo de ver que este gobierno de la ciudad se ha mostrado incapaz de cumplir lo que ofreció, ya que comprendo plenamente la inconformidad y decepción que cada vez sienten más los poblanos, cuando circulan por las calles y sus autos son dañados por los baches y salen por las noches sintiéndose inseguros por vivir o ir a una colonia oscura.
Como millones de poblanos, quisiera tener Funcionarios de primer nivel que ocuparan más de su esfuerzo, tiempo, recursos financieros y humanos de la Comuna en resolver los múltiples problemas y demandas de la ciudad y menos en pensar en sus aspiraciones politicas.
Es entendible que al interior del ayuntamiento predomine la preocupación por el futuro político de quienes lo encabezan, pero es muy nocivo para la ciudad que algunos de estos personajes se ocupan muy poco de mejorar las condiciones de vida de quienes vivimos en el municipio.
Además, me parece deleznable que el mundo feliz y utópico que dibuja la propaganda oficial del Ayuntamiento en los medios de comunicación, sea totalmente diferente a la realidad diaria que padecemos cotidaniamente todos los ciudadanos.
Es claro que los poblanos de a pie vivimos en un Municipio y los altos funcionarios del gobierno de la Angelópolis en otro.
Al igual que miles de poblanos, no estoy de acuerdo con que la gestión municipal endeude más a la ciudad por 180 millones de pesos, para hacer una "megaobra" que trate de ocultar el olvido en que este Ayuntamiento ha tenido a la capital, sobre todo porque en lo que va del trienio ya aumentó este endeudamiento en casi 300 millones de pesos y lo tiene en 983 mdp (nota del portal E-Consulta, 23 de septiembre).
Tampoco estoy de acuerdo con los excesivos y millonarios gastos del gobierno municipal en asesores, comidas y frivolidades como la llamada "Villa Navideña" y, mucho menos, con el hecho de que a decenas de altos funcionarios se les paga tanto radio como celular, aparte de que a muchas personas que ni siquiera trabajan para la ciudad se les cubren sus erogaciones de comunicación.
El hecho de que varios funcionarios municipales "de primer nivel" estén más ocupados en gastarse el dinero de los poblanos en comidas y en llamadas vía celular y radio, que en trabajar a favor de la ciudad, demuestra que –lamentablemente – la mayoría de ellos se comporta como si el servicio público fuera un "botín" y no como lo que realmente es: "la oportunidad de servir a los poblanos y al municipio en que vivimos".
Por todas estas razones y muchas más, que seguiré enumerando, pido una sincera disculpa a los Poblanos que esperaban (esperábamos) mucho más de este gobierno local, pero que hemos sido decepcionados y olvidados por una administración ineficiente, omisa y autocomplaciente.
*Presidente de la comisión de Derechos Humanos en el Cabildo de Puebla