martes, 13 de octubre de 2009

El “presidente del empleo” deja sin trabajo a 60 mil electricistas




BITÁCORA MUNICIPAL

Por Enrique Chávez Estudillo*

El "presidente del empleo" deja sin trabajo a 60 mil electricistas

De un plumazo y de un día para otro, quien hace poco más de 3 años prometió ser el "presidente del empleo", Felipe Calderón Hinojosa, dejó sin trabajo a más de 60 mil electricistas, dos mil de ellos en la Sierra Norte de Puebla y ocasionó un grave problema social y económico para varias regiones del país, incluida la ciudad de México y el municipio poblano de Juan Galindo o Nuevo Necaxa.

Muchos columnistas nacionales (algunas más o menos respetables y otros simple voceros del presidente en turno) han aplaudido la medida de desaparecer a la paraestatal Luz y Fuerza del Centro (LyFC) con los mismos argumentos: la supuesta ineficiencia de la empresa, lo costoso de mantenerla funcionando y, sobre todo, la "cerrazón" del sindicato que encabeza Martín Esparza a perder derechos laborales.

Con esta decisión, ya son dos ataques que los gobiernos federales panistas han implementado contra sindicatos que no ceden a sus órdenes ni son parte del "charrismo oficial": primero Vicente Fox Quesada y luego Felipe Calderón Hinojosa trataron de aniquilar a la agrupación minera que dirige Napoleón Gómez Urrutia, sin conseguirlo hasta ahora y, desde hace dos semanas, el calderonismo llevó a cabo una campaña televisiva contra el SME, para legitimar su decisión de desaparecer a la agrupación.

Hasta los voceros del calderonismo han reconocido que su jefe decidió exterminar al SME, porque no accedió a quedarse sin conquistas laborables, ¡que el propio gobierno federal le dio al sindicato a través de los años! y que, lógicamente, hoy se negaba a perder.

La polarización extrema en las relaciones obrero-patronales fue un factor importante, que desencadenó este intento gubernamental de desaparecer a la paraestatal, pese a que la determinación deja en la calle a más de 60 mil trabajadores, especializados en el área eléctrica, porque la intención del calderonismo es solamente recontratar a 10 mil, lo que corrobora que a partir del domingo por la mañana otros 50 mil mexicanos quedaron en el desempleo.

En Puebla, como ya lo han dicho varios conocedores del tema, el municipio de Nuevo Necaxa vive (¿o vivía?) de LyFC y esto implica que hoy hay 2 mil poblanos desempleados más que el viernes pasado. Hasta ahora, los gobiernos federal, estatal y municipal de Juan Galindo no han dicho si tienen algún programa, para reactivar la economía familiar de quienes se quedaron sin empleo y regional de las zonas afectadas.

Desde luego que una parte importante de la culpa de lo que ahora les pasa a los miembros del SME es de los representantes de la organización, que se disputaron el poder sin prever que su polarización interna le daría al gobierno federal el pretexto que necesitaba para desaparecer al sindicato.

Sin embargo, el autollamado "presidente del empleo" debería tener un plan concreto, para aprovechar la experiencia y capacidad de los electricistas por él despedidos y, al mismo tiempo, darles la oportunidad de seguir ejerciendo su profesión y vivir dignamente.

De lo contrario, el desempleo, la necesidad y el rencor hacia un gobierno federal que claramente atentó contra su medio de vida, podrían generar que algunos de los trabajadores decidan dedicarse a actividades ilícitas. Y el entorno social que prevalece en todo el país es – de por sí – de una gran crispación y molestia generalizada contra un Ejecutivo que solamente ha traído crisis, muerte y falta de oportunidades.

*Presidente de la comisión de Derechos Humanos en el Cabildo

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