Por Enrique Chávez Estudillo *
Disfrutemos nuestra ciudad
Mucha gente aprovecha estas vacaciones de verano, para salir de viaje con la familia, disfrutar de alguna hermosa playa mexicana y tratar de olvidarse por unos días del estrés diario y del trajín laboral, aunque también habemos poblanos que por razones monetarias o laborales no podemos salir de la ciudad, aunque tenemos más tiempo de descanso y, en consecuencia, debemos aprovecharlo.
Por ende, estos días de menor actividad humana y laboral representan una inmejorable oportunidad, para que los poblanos reconozcamos y disfrutemos nuestra ciudad, que es una de las más bellas del país, por eso se le llama "relicario de América" y desde 1987 fue nombrada Patrimonio Cultural de la Humanidad, por la enorme cantidad de edificios históricos y religiosos que le dan vida y sentido al municipio.
Nuestra ciudad conserva varios monumentos relevantes, como el Palacio Municipal, construido en cantera gris; además del ex Palacio de Gobierno, de notoria influencia francesa; la Casa de la Cultura y, desde luego, la hermosa catedral, que es una de las más bonitas del contienente.
Por esto, no es de extrañarse que el Centro Histórico del municipio haya sido declarado por la UNESCO como Patrimonio de la Humanidad el 11 de diciembre de 1987, gracias a que cuenta con 2169 monumentos históricos catalogados, entre los que se encuentran la Biblioteca Palafoxiana, la Casa de los Muñecos, la morada del que Mató al Animal, la Iglesia de la Compañía, el Teatro Principal y la hermosísima capilla del Rosario en el templo de Santo Domingo.
Además, contamos con sitios en que se pueden realizar varias actividades deportivas y ecológicas, como la laguna de Chapulco, el parque ecológico, los fuertes de Loreto y Guadalupe y hasta la zona de Valsequillo, donde se puede disfrutar de un buen día de campo, del partido de fútbol con los amigos o de una agradable cita y plática con la pareja, tomados de la mano y caminando alrededor de los árboles.
Incluso, nuestro municipio es vasto – también – en cuestiones comerciales y culturales. Contamos con plazas como Angelópolis, Dorada, La Noria, Las Ánimas o Cristaltal, en que se puede comprar todo tipo de artículos de buena calidad y, después, finalizar el paseo con una buena película.
Y si un día la familia quiere realizar actividades culturales y educativas, pero divertidas, nada mejor que ir a los muchos museos de la ciudad, como el Amparo, el Imagina, los Bello, el de Arte Virreinal, el de los Ferrocarriles, el de la Revolución Mexicana, el Universitario o el planetario, donde se puede disfrutar de un documental educativo y ameno, para después salir a tomar una nieve y a recorrer la histórica zona de los fuertes.
Como puede constatarse, nuestra ciudad tiene diversión, esparcimiento, cultura y comercio para todos los gustos, edades y presupuestos. Por ello, hoy que muchos están de vacaciones, quienes nos quedamos en Puebla podemos disfrutarla mucho más limpia, tranquila, amable y bella.
* Presidente de la comisión de Derechos Humanos en el Cabildo de Puebla
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